Ready for London

Londres no se acaba nunca.

Salíamos ésta mañana en el tren de las 10.00 am hacia la capital. A las 10.50 am, nos enrutamos vía metro al Museo de Historia Natural. Un poco de cultura no nos vendría mal. El tiempo nos sonreía. Una manera de darnos la bienvenida.

Tras el chapuzón más que de historia, de pasteles y souvenirs, realizamos un tour por la ciudad para tomar fotografías del Parlamento, la Abadía de Westminster, el Whitehall, Trafalgar Square…los Tesoros contaban los minutos para volver al metro y empezar de una vez por todas con el shopping frenético en Westfields. Un centro comercial de los más grandes de Europa, con todas las marcas.

A los tres mosqueteros me los llevé a cuestas todo el viaje, durante el museo, el tour…y llegados a Westfields, les recalqué que podían ir en cuchipandi sin mi supervisión. Las caras se les recompusieron entonces. Pues desde que listamos mi grupo para salir de excursión y vieron que venían conmigo y los de 12, no daban crédito que servidora pudiera mantener la buena memoria respecto al tema abrigos.

Mientras, Irene y María iban con otro grupito y una monitora. Hicieron también sus compritas. Todos picaron.

Ha sido un día de miércoles donde todas las piezas del puzzle han encajado. A pesar del estrés que supone adentrarnos en la vorágine londinense, todo salió rodado.

Llegamos justo para la cena y cada uno a sus casas para la sesión de cine o vídeoconsola, palomitas y chocolate caliente.

Mañana jueves. El tiempo se nos escapa de verdad.

Felices sueños desde Folkestone.