Los viernes son días de salida. Muchos niños terminaron su campamento de verano, mientras nuevas incorporaciones vendrán durante el fin de semana. Principalmente de Turquía y Rumanía.
¿En qué nos repercute ésto? nuevos compis de clase y en algunos casos de habitación, apertura a nuevas nacionalidades y sobretodo, un esfuercito que tendremos que hacer para integrar a los nuevos, como en su día lo hicieron con nosotros. Seguro que lo hacen muy bien.
El día comenzó con mi «espionaje» frustrado a las clases. Agazapada tras las puertas, dotoreo y trato de encontrar el aula de Amparo y Teresa, los únicos tesoros que me quedan por fotografiar entre carpesanos y bolis. Pues bien, me resultó imposible verlas hoy. No llevaba las gafas. Así que me encontré con las dos raspitas Eva y María apoderándose de la clase.
Las lecciones han transcurrido con normalidad y probablemente el lunes, haya cambio de niveles también. Porque además de pasarlo bien, vamos aprendiendo.
Entre ellos, los únicos «Spanish» del campamento para alegría de servidora y padres, han hecho muy buenas migas. Pero la condición es que siempre estén con internacionales haciendo cuchipandi.
Tanto que nos quejábamos del clima inglés, hoy nos regaló un día soleado y con temperaturas primaverales. Lo cual dio mucho juego para el disfrute de actividades al aire libre. Al quedar pocos en campus (hasta que venga la nueva remesa y aumentemos a los 100), compartimos ratos y juegos.
Los más valientes se atrevieron con el «water slide». Un juego simple pero bien divertido. Con una lona, agua y fairy, el mundo es nuestro.!
Algunos me decían que eso valía como ducha del día. Me parece que se han ido a la cama con el fairy y medio césped en la espalda. No quiero ni pensarlo.
Tras la cena, dos opciones para todos: Fútbol o Sesión de Belleza. Tanto en una actividad como en otra, participaron niños y niñas indistintamente. Porque igual de bien está pegarle patadas a un balón, como degustar fresas, chocolates y zumos mientras nos ponen una mascarilla relajante con fondo de música. Y creo que todos disfrutamos.
Teresita de mi corazón me pasó éstas otros fotos. Mucho más espontáneas que cuando se las hago yo!
Cerramos la noche con una frase histórica de Raspita Eva y su cara llena de restos de mascarilla. Mañana tiene nueva compañera de habitación. Me preguntaba por su nacionalidad…yo le dije que igual era rumana….y me dijo…¿Los rumanos son italianos?. Ay! qué lío llevo! 🙂
De Rumanía, China, Italia o la Conchinchina. ¿Qué mas da? Lo importante es que aprendamos que la convivencia no tiene fronteras ni colores. Esa fue mi respuesta haciendo esfuerzos máximos por no comérmela a bocados.
Mañana nos espera un English Breakfast sin madrugón. A las 8.20 am amaneceremos. Todo un lujo. Esperemos que Inglaterra nos siga regalando su sonrisa más soleada para poder llevar a cabo todas las actividades y deportes previstos.
Con la energía de un día tranquilo pero activo, nos despedimos, queridos padres. Y lo hacemos con un gran abrazo.
Felices sueños desde Dover. Luces apagadas. Los tesoros, divinos todos, duermen.
Pepa Ferrer- Programas de Idiomas en el Extranjero
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