Punto de inflexión en nuestra inmersión inglesa

Los puntos de inflexión, marcan un antes y un después. Pero no suceden gratuitamente de la noche a la mañana.

A mitad de travesía de nuestra inmersión británica, empezamos ya a recoger los frutos del esfuerzo realizado durante esta experiencia transformadora. También pasa, que se dispara la tensión acumulada por el reto que supone estar bajo presión, ajustándonos a las nuevas situaciones, con todos los sentidos puestos, absorbiendo aprendizaje. Cada uno de nosotros lo gestionamos de acuerdo a nuestros recursos y experiencias previas. Estamos redescubriendo nuestro potencial y también todo lo que no dominamos.

La jornada de hoy nos dio un impulso renovado para seguir apuntando lejos.

Abrimos el día con un «late morning» y un brunch a las 10.00 am antes de marchar de paseo a la población vecina de Sandgate. Un cielo abierto nos acompañó durante la caminata y allí, rodeados de naturaleza, disfrutamos de una mañana de sábado relajada, en cuchipandi y moviendo los paladares con helados varios.

Nos recogimos unas horas después para materializar nuestra escapada al Outlet de Ashford. Si bien a servidora le salen canas verdes cuando le hablan de shopping, he de decir que la tarde se fue cerrando de lo más agradable, tranquila y sin gentío. Fue un cierre de día de esos de «Go with the flow»

Earlscliffe ya lo sentimos nuestro colegio. Como si ya hubiéramos estado toda la vida. Familiarizados con la rutina, con el inglés y con los compis internacionales.  Sumando experiencias significativas.

Nuestros Tesoros descansan. Luces apagadas.

Felices sueños desde una Folkestone que también tendrá su punto de inflexión cuando la dejemos.